En medio de una disparada inflacionaria, desde el Gobierno nacional madura la idea de extender un nuevo bono a los jubilados y pensionados de haberes más bajos para poder compensar la pérdida que provoca la escalada de los precios en el país.

Esta medida empezó a evaluarse como parte del paquete de iniciativas que se enmarcan en la "guerra contra la inflación" que propuso el Presidente Alberto Fernández. El anuncio del bono se realizaría en las próximas horas, tan solo restaría confirmar cuál es su valor exacto, pero el mismo se pagará en el mes de abril y abarcaría a 5 millones de jubilados y pensionados sobre los 8,4 millones de todo el sistema.

"También se estudia la posibilidad de incluir a los empleados de la administración pública nacional", señalaron desde el sitio especializado en contenido laboral, Infogremiales. 

Dentro de la cúpula gubernamental existió un extenso debate por este tipo de subas que el Gobierno emite para compensar a los jubilados y pensionados, ya que desde el FMI se advirtió en un informe que "deben evitarse las subas discrecionales de las jubilaciones y pensiones ya que pueden socavar las metas fiscales y la sostenibilidad del sistema". Estos aumentos "discrecionales" son aquellos que se realizan por fuera de los aumentos trimestrales para que no afecte tanto la subida de la inflación.

El último bono que se emitió fue en diciembre del 2021 y fue de $8000. Se esperaba que a partir de allí, sumado al primer aumento trimestral del año, no se tuviera que aplicar un nuevo bono de estas características, pero en cuestión de dos meses la canasta básica aumentó de una forma más desmedida de lo esperado.

En este marco, el Presidente pidió este lunes "darle una oportunidad al diálogo" para construir una realidad distinta "en un país lleno de urgencias", y reconoció que el mayor problema actual de la Argentina es la inflación que "impide que la distribución sea más justa".