En la apertura del premercado en Wall Street, los ADR argentinos sintieron el impacto inmediato del contundente triunfo peronista en las elecciones de la provincia de Buenos Aires, con retrocesos en todos los sectores clave: bancario, energético y de servicios públicos, entre otros .

Las acciones más afectadas incluyeron Grupo Financiero Galicia (GGAL), que cayó un 15,21 %, Banco Macro (-10,03 %), Banco Supervielle (-11,36 %) y BBVA Argentina (-7,54 %) . Además, YPF sufrió una baja del 11,29 %, Vista Energy retrocedió 8,09 %, Pampa Energía descendió 8,43 % y Edenor cayó 13,27 % .

En el mercado de deuda, los bonos soberanos bajo ley de Nueva York también registraron caídas pronunciadas: el Global 2035 bajó 8,89 %, el Global 2038 perdió 8,72 %, y otros papeles como el Global 2046 se redujeron aproximadamente un 8,4 % .

La reacción violenta de los mercados se da en un contexto de creciente desconfianza política y económica: tras la derrota del oficialismo bonaerense, inversionistas observan con cautela la capacidad del gobierno para sostener su agenda de reformas y aseguran que la estabilidad de activos argentinos dependerá de señales claras desde el plano político .