Agustín Creevy se despidió del rugby profesional donde todo comenzó: el club San Luis. El ex capitán de Los Pumas disputó su último compromiso ante Belgrano Athletic por el Top 12 de la URBA, en un marco de ovaciones y emociones que superaron al propio resultado, que terminó 22-17 a favor del conjunto visitante.

La jornada estuvo cargada de símbolos. Creevy ingresó al campo acompañado por su familia, atravesó un pasillo formado por compañeros y rivales, y recibió una camiseta enmarcada como recuerdo imborrable de su trayectoria. El aplauso de la gente fue constante y se transformó en el verdadero protagonista de la tarde.

En declaraciones a Scrum, el hooker confesó que vivió “una semana muy linda y distinta”, y que aún no asimila la magnitud del adiós. Además, dejó un mensaje a los más jóvenes de San Luis: “Disfruten cada momento con esta camiseta… me voy muy orgulloso de ustedes”.

El retiro de Creevy marca el cierre de una etapa dorada para el rugby argentino. Su liderazgo, su compromiso y su recorrido internacional dejan un legado que trasciende camisetas y fronteras, consolidándolo como uno de los referentes más grandes que vistió la celeste y blanca.