POLICIALES
Condenan a prisión perpetua a la expareja de Marianela Rago Zapata
Así lo decidió el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 29, que condenó a Amador (36) por ser el autor del delito de "homicidio agravado por haber sido cometido con ensañamiento y alevosía"
Un tribunal condenó hoy a prisión perpetua a Francisco Amador por el crimen de su expareja Marianela Rago Zapata, la joven de 19 años hallada asesinada de 23 puñaladas y degollada en su departamento del barrio porteño de Balvanera en julio de 2010.
La sentencia fue dictada por el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 29 que condenó a Amador, de 36 años, por el autor del delito de “homicidio agravado por haber sido cometido con ensañamiento y alevosía”, y ordenó su inmediata detención, según informó la agencia de noticias Télam.
“Hoy volvemos a vivir”, dijo Matías Rago Zapata, hermano de la víctima pocos segundos después de haber escuchado la sentencia.
Hoy, antes de que el tribunal, integrado por los jueces Hugo Navarro, Juan María Ramos Padilla y Rodolfo Goerner, se retirara a deliberar, Amador hizo uso de su derecho a decir las palabras finales y sostuvo: “Señores, yo no maté a Marianela Rago. Se pudo haber comprobado que existieron los hechos de violencia, pero eso no me convierte en un asesino”.
Minutos antes, su abogado, Luis Ricca, alegó durante una hora y enumeró las razones por las cuales consideró que su defendido no fue el asesino de Rago Zapata.
“Creo que en esta causa lo único que se probó es la violencia de género. Pero eso no significa que el acusado haya sido el autor de un homicidio. Amador pudo haber ejercido violencia de género contra Marianela, pero eso no significa que sea el homicida”, afirmó Ricca.
Durante el debate, familiares de la víctima como amigas y allegados que declararon como testigos pusieron en evidencia situaciones de violencia física y psicológica que presuntamente la joven estudiante de periodismo sufrió por parte de su expareja, a quien conoció en la ciudad fueguina de Río Grande en 2008, calificando a la relación como “tóxica”.
Ricca profundizó en las pruebas de huellas dactilares y perfiles genéticos que fueron hallados en la escena del crimen, en una lata de gaseosa, colilla de cigarrillos y en un cigarrillo de marihuana.
”Aparece una lata de gaseosa sobre la mesa que todos los testigos de la previa manifiestan que no estaba en ese momento. Había una remera XXL, colillas de cigarrillos y un porro de marihuana. En una de esas colillas, aparece el ADN de un masculino, que no es Amador, y de Marianela. Se encontró sangre en el pantalón de Marianela, que se estableció que poseía dos perfiles genéticos de origen masculino. Ninguno de esos perfiles coincide con la de Francisco Amador. Tampoco con las colillas de cigarrillos analizadas”, sostuvo el abogado defensor.