ECONOMIA
Alquiler 2023: cuánto se pagará desde enero
La Ley de Alquileres establece ajustes anuales contemplando la variación de la inflación que mide el Indec y la de los salarios, que establece el Ripte. Índice para contratos de locación (ICL) del Banco Central.
De acuerdo con la Ley de Alquileres vigente, la cual establece que los aumentos de los contratos se rigen por ajustes anuales, los inquilinos que firmaron un contrato en enero de 2022, percibirán el próximo mes un aumento de alrededor del 83,5%. En diciembre, el incremento rondó el 77,58%.
Para calcular el aumento del precio del alquiler se puede consultar el Índice de Contratos de Locación (ICL) que publica todos los días el Banco Central, y que contempla la variación de la inflación (según el Índice de Precios al Consumidor IPC del Indec) y los salarios, de acuerdo con la remuneración promedio de los trabajadores estables (RIPTE).
Para aplicar el ajuste en base al ICL, se debe utilizar una fórmula teniendo en cuenta el valor de dos fechas: la del inicio de la última actualización de valores y en la que se hará el aumento. El índice se puede consultar en la web del Banco Central, ingresando en la pestaña “Estadísticas”, luego “Principales variables” y allí "ICL".
El usuario deberá seleccionar las fechas de inicio y finalización del período que se quiere consultar. Primero se debe colocar la fecha en la que se concretó la última actualización, para saber cuál era el índice en ese momento, y en la que se hará el ajuste. Luego, tomar el precio actual del alquiler y dividirlo por el valor del primer índice. Por último, se debe multiplicar ese monto por el índice de la fecha en la que cambia la cifra del alquiler. El valor que arroje será el importe del alquiler que el inquilino deberá abonar durante todo el año.
Según la Ley de Alquileres vigente, el plazo mínimo para los contratos de alquiler de viviendas es de 3 años y el precio del alquiler se fija como valor único, por períodos mensuales y con ajustes anuales, que se efectúan en base al ICL. Es decir, cada 12 meses los inquilinos deberán afrontar una suba en base a los aumentos salariales y la inflación, siempre sobre el valor original del alquiler.