Una verdadera tragedia sacude este Domingo de Pascuas a la ciudad de Venado Tuerto, 335 kilómetros al sur de esta capital. Un bebé de un año murió esta madrugada, supuestamente ahorcado con el cordón del chupete. Según las primeras averiguaciones, se presume que se trató de un accidente doméstico.

Los médicos que lo recibieron en el hospital informaron que el niño ingresó prácticamente sin signos vitales y, pese a los esfuerzos de los profesionales por reanimarlo, no lograron el objetivo y el niño falleció.

El fiscal que interviene en la causa, Damián Casullo, aún no definió la carátula de la causa, ya que sigue investigando el caso que, en principio, se trataría de un accidente en la propia casa donde los dos jóvenes padres moraban.

Al respecto, este domingo se conoció que el menor fallecido fue identificado como Mauro N, domiciliado en Cabral 1766, de Venado Tuerto, y que sus padres, cuyos datos de filiación no trascendieron, tienen 23 y 22 años.

Según el relato aportado por los investigadores, el niño fue trasladado por sus progenitores al Hospital Regional “Alejandro Gutiérrez”, aproximadamente a la medianoche pasada, aparentemente sin signos vitales, asfixiado con el cordón del porta chupete.

Desde el nosocomio se informó a las autoridades y el fiscal en turno del Ministerio Público de la Acusación (MPA), Damián Cassullo, quien ordenó que se inicie una investigación.

De inmediato se entrevistó al personal del nosocomio y se comisionó a la Policía Científica al hospital y al domicilio de la víctima para la toma de vistas fotográficas y filmaciones, y para proceder al secuestro de la ropa de cama.

El parte policial, al que accedió este diario, indicó que “se toma conocimiento de que en el Hospital local habría ingresado un menor de 1 año de edad, sin vida, aparentemente ahorcado con el cordón del chupete (porta chupete)”.

“Al momento, la causa no tiene calificación legal, ya que está en plena etapa de investigación”, reiteró la policía.